Buenas noches, hermanita!
Tranquila que ya estoy aquí!!!
Está claro que quien con niños se acuesta, mojado se levanta!! menudo par de impresentables, sobre todo él, que baila al son que le tocan.
No le ha importado dejarte a los pies de los caballos, con el fin de no discutir con la pendeja, pensando que cuando te vuelva a ver lo iba a poder arreglar fácilmente, dándote excusas absurdas.
Moisés solo piensa en qué contarte para que te creas que estuvo obligado a decirte lo que te dijo. Su doble juego le ha salido mal y debe pagar por ello, por lo que te sugiero que impongas la ley del silencio, y no hagas ningún tipo de intención de hablar con él, ni de verle.
Mis cartas te aseguran que él no está tan tranquilo y sabe que ha hecho un daño innecesario con una persona que no se lo merece, y en compañía de un ser despreciable como la pendeja.
Amiga, aunque creas que no, el problema lo tiene él, no tú, tú solo tienes que esperar en silencio, porque te aseguro que Moisés, volverá a ti.
Esto no acaba aquí, ni así.
Un abrazo enorme, cariño!!!